miércoles, 27 de enero de 2010

(Locura de) Amor


sin "El", porque El Amor suena, qué sé yo, a nombre de pueblerino (con todos mis respetos a los pueblerinos, ¿eh? Yo mismo soy hijo de...), como El Braulio, El Clemente...Dejémoslo en Amor. Amor, Amor...¿existe Amor? Claro que existe...así, con mayúsculas, aunque durante tanto haya renegado de él. El problema no es que haya que buscarlo, sino estar predispuesto a que él te halle...Prefiero no leer lo que acabo de escribir. No me gustaría nada; y encima he utilizado la segunda persona del singular, que según algunos escritores (Umbral sobre todo) empobrece la expresión escrita...En fin, para, es hora de parar, de hablar de El Amor, o Amor, o como se diga...Los que lo conocen ya saben lo bien que sienta, aunque sea un atontamiento, atolondramiento o lo que sea...Amor, AMOR, El Amor, qué más da cuánto dure...Como si fuera a durar más la vida, VIDA, La Vida, o mejor...Vida, sin "La", porque La Vida suena, qué sé yo, a nombre de pueblerina (con todos mis respetos a las pueblerinas, ¿eh? Yo mismo soy hijo de...

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