domingo, 24 de febrero de 2008

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Las verdaderas razones por las que el lobby sionista de EEUU persigue al nieto del Mahatma Gandhi (artículo que he leido en el blog "mamanga", tenéis link desde el mío)

Sábado 9 de febrero de 2008

BUENOS AIRES (RED KALKI) -- En las últimas semanas, el lobby sionista de EEUU desató una feroz persecusión contra el Dr. Arun Gandhi, nieto del reconocido líder pacifista hindú, por haberse pronunciado contra Israel y reclamarle a los judíos que pongan fin a su constante victimización por el presunto "holocausto".

Arun Gandhi, de 73 años, era el fundador y presidente del "Instituto Gandhi para la No Violencia", con sede en la universidad estadounidense de Rochester, y es padre de Tushas Gandhi, quien preside la Fundación Mahatma Gandhi con sede en Bombay, India, y que fue quien logró recuperar las cenizas de su bisabuelo para poder verterlas en el río Ganges. El pasado 7 de enero fue invitado por el diario The Washington Post a que escribiera un ensayo para aportar al tópico "Identidad Judía" que promocionaba el medio. El Dr. Gandhi decidió abordar el tema desde un enfoque diferente, dando su opinión sincera y crítica respecto a la conducta del judaísmo, sin tratar de ser "políticamente correcto", sino pronunciando su verdadero pensamiento. De este modo, escribió:

"La identidad judía parece haber quedado atada al holocausto. El holocausto fue nefasto, sí, pero los judíos hoy no sólo quieren que los alemanes se sientan culpables sino que todo el mundo lo esté. Este es un muy buen ejemplo acerca de como una comunidad puede llegar a sobreactuar una experiencia histórica, al punto que termina despertando el rechazo y la repulsa de sus propios amigos. El mundo sintió pena, pero cuando un individuo o una nación se rehúsa a perdonar, esa compasión de los demás se trastoca y termina convirtiéndose en odio.

"El futuro de la identidad judía parece sombrío. Cualquier nación que permanece anclada en el pasado es incapaz moverse hacia adelante, sobre todo cuando también cree que su supervivencia sólo puede ser asegurada por armas y bombas. Fui a Tel Aviv en 2004 y tuve la oportunidad de hablar con algunos miembros del Parlamento y con los activistas de paz judíos, que defendieron la construcción del Muro de Cisjordania y decían que el refuerzo militar era necesario para proteger a la nación y sus habitantes. En otras palabras, yo les pregunté: ´¿Ustedes creen que creando un pozo de serpientes - con muchas serpientes mortales en él - podrán vivir luego seguros?´"´¿Qué quiere decir?´, bramaron ellos."´Bien, con sus armas superiores y su actitud hostil hacia sus vecinos ¿no tengo razón al decir que ustedes están creando el hoyo de la serpiente? ¿Cómo puede vivir cualquiera apaciblemente en tal atmósfera? ¿No sería mejor cambiar su actitud ante los que los odian? ¿No pueden extender la mano y compartir su avance tecnológico con sus vecinos, dando inicio a una nueva relación? Al parecer, en el mundo moderno, tan determinado a vivir en guerra, éste es un concepto extraño. Ustedes no ayudan a nadie, ustedes los esclavizan.´ Se ha eregido una cultura de la violencia, en la cual Israel y los judíos son sus principales protagonistas, y esa cultura de la violencia va a destruir a la humanidad en el futuro."

A las pocas horas de haberse publicado este escrito, el dirigente sionista Abraham Foxman, que maneja la denominada "Liga de Anti-Difamación" en EEUU, atacó al Dr. Arun Gandhi en un comunicado, alegando que "es vergonzoso que un instituto de paz sea presidido por un fanático. Esperábamos que el nieto de Gandhi fuera más condescendiente con la historia judía".
Como Foxman, los jerarcas del Congreso Judío Mundial movieron sus contactos en Washington para acabar con la vida pública del Dr. Gandhi, y en cuestión de días lograron forzar su renuncia al instituto que él mismo había fundado, a raíz de que la Universidad de Rochester le quitó su apoyo.

Cabe preguntarse ahora, ¿cuál fue exactamente el delito de Arun Gandhi? ¿Haberle pedido a los judíos que aprendan a perdonar? ¿Haberles dicho que Israel debía acabar con su política de agresión hacia sus vecinos? ¿Exponer sus defectos? Arun Gandhi explicó posteriormente sus palabras: "No soy extremista ni tuve intención de insultar a los judíos, simplemente quise generar una sana discusión acerca de la proliferación de la violencia".

Tal como viene ocurriendo en los últimos tiempos, nuevamente Irán fue el único país que se atrevió a tomar partido por un hombre que enfrenta al sionismo, y desde el canal oficial Press TV se realizó un programa especial en el que se divulgó en todo el mundo árabe esta escalada de ataques contra Gandhi. En EEUU, varias organizaciones humanitarias también hablaron a favor del descendiente de Mahatma, advirtiendo que es cada vez más intolerable vivir bajo la presión del lobby sionista, que parece haber llegado a su cénit bajo la administración Bush.

Ahora bien, es sumamente interesante retomar las palabras de Foxman, quien acusaba a Arun Gandhi de no ser coherente con la línea de pensamiento de su abuelo. Tales dichos carecen de fundamento, porque como veremos a continuación, Mahatma Gandhi fue un gran enemigo del sionismo, e incluso nunca ocultó su simpatía por el fascismo y su cercanía al nacionalsocialismo alemán.

Gandhi y su auténtico pensamiento político
El líder hindú propagó por todo el mundo su doctrina de la no-violencia, pero tenía muy claro que ya en el mundo de entonces, los opresores de los pueblos eran los ingleses y sus aliados. De esta manera, Gandhi decidió tomar contacto con los enemigos del imperio británico en Europa. Y lo hizo con varios, aunque sentía particular admiración por uno de ellos: Benito Mussolini.
En lo que representa uno de los capítulos menos divulgados de su vida, Gandhi visitó a Mussolini en Roma en 1931. A diferencia de Churchill, que sentía desprecio por el pacifista y lo tildaba como "ese fakir desnudo", el Duce le tenía un profundo respeto. Gandhi fue recibido en la residencia personal de Mussolini, y fue el invitado de honor de un gran desfile de la Juventud Fascista, que lo recibió con el tradicional saludo romano. Posteriormente, Italia no dudó en ayudar económicamente al movimiento patriota indio, una ayuda que fue vital para continuar la resistencia contra la ocupación inglesa.

Gandhi dijo luego de Mussolini: "Él es un verdadero superhombre, alguien inalcanzable. Es el nuevo Mazzini de Europa".

En 1938, poco antes de la Segunda Guerra Mundial, el dirigente hindú ya observaba con alarma los movimientos del eje anglo-sionista en Palestina, que preparaban el camino a la creación de Israel, y advertía: "Palestina pertenece a los árabes, exactamente como Inglaterra pertenece a los ingleses. Los judíos sionistas erran el camino".

Ya iniciada la guerra, todas las colonias inglesas vieron con natural esperanza al Eje, que prometía derrotar al país que los mantenía esclavizados. En aquel conflicto, era común que las naciones árabes recibieran como salvadores a los soldados alemanes, y el general Rommel pronto se convirtió en héroe por comandar a los Afrika Korps. Asimismo, en la India todos los patriotas contemplaban y seguían en forma entusiasta el curso inicial del conflicto. Gandhi era amigo de Mussolini, y a su vez, no había que olvidar que el Reich utilizaba como emblema oficial la Esvástica, el símbolo más sagrado del hinduísmo. Sobraban motivos para que las simpatías hacia Roma y Berlín fueran cada vez más fuertes, y como corolario, se terminó conformando una división especial de las Waffen SS con miles de voluntarios hindúes.

En este contexto, cuando Alemania ataca a Inglaterra en 1940, Gandhi no dudó en pronunciar un mensaje al pueblo británico que durante mucho tiempo fue censurado por las autoridades inglesas:
"Dejen las armas, por cuanto éstas no van a servir para salvarles a ustedes ni a la humanidad. Deben invitar a Hitler y Mussolini a que tomen todo lo que quieran. Si quieren ocupar sus casas, vayánse de ellas. Si no les permiten salir, sacrifíquense a ellos, pero siempre rehúsen rendirles obediencia".

La verdadera intención de las palabras de Mahatma, un hombre instruído e inteligente, era clara: deseaba que los ingleses se rindieran lo más pronto posible, buscaba desalentarlos, convencerlos de que no tenían oportunidades. De lograrlo, la independiencia de su patria era un hecho. Por eso, empleó un discurso alineado a su prédica de no-violencia, pero que leído entre líneas guardaba un significado diferente.

En 1941, en una de las tantas detenciones que Gandhi tuvo que padecer por orden de Churchill, los ingleses lo obligaron a escribir una carta a Hitler en la que le tenía que pedir que terminara con la guerra. Gandhi escribió la carta, pero luego Churchill decidió que no fuera publicada, porque durante ese período de tiempo el hindú había hecho otras declaraciones que la hacían inverosímil. Por ejemplo, el haber criticado duramente a los judíos alemanes pocos meses antes, diciendo:
"Los judíos alemanes traicionan a Alemania. Ellos tratan de convencer a Estados Unidos de que entre en guerra con su país, cometiendo un acto de deslealtad".
Tiempo después, también dirigió un mensaje a los judíos europeos en general, en el que les pidió:
"Ustedes deben cometer el suicidio colectivo, y así obtendrán el visto bueno de la Providencia. De hacerlo, el mundo se levantará, compadeciéndose de su final, y le pedirá a Hitler el fin de la violencia".

En otra declaración, Gandhi indicó que el sufrimiento de los judíos también se debía, entre otras cosas, a su histórica política bíblica del "ojo por ojo", y por haber "asesinado a Cristo".
Al concluir la guerra, el Eje perdió pero Inglaterra quedó tan debilitada que el fin del colonialismo en la India se había vuelto inevitable. Gandhi puso ahínco para lograr la ansiada libertad, pero contempló con tristeza e impotencia como sus viejos enemigos ayudaban a los sionistas para acabar con Palestina y crear Israel. Por ello, en 1946 Gandhi escribió un ensayo que tituló "Los judíos y Palestina", en el que repudió a los seguidores de Teodoro Herlz y sus crímenes, y llamándolos a la reflexión, indicó:

“...Y en mi opinión, los judíos se equivocaron lastimosamente al pretender imponerse en Palestina con la ayuda de los norteamericanos y los ingleses, y más aún al apelar ahora a un desembocado terrorismo. ¿Por qué deben recurrir al terrorismo para hacer posible su expropiación de Palestina?".

Pese a sus palabras, en 1948 Israel nació de entre las ruinas y la sangre de los palestinos.
Todo lo expuesto denota entonces que el Dr. Arun Gandhi ha sido absolutamente fiel al pensamiento de su abuelo, y que hoy en día existe una imagen distorsionada del líder hindú. Mahatma fue un dirigente nacionalista que llevó adelante un movimiento para libertar a su nación, alguien que sabía muy bien lo nefasta que es para la humanidad la existencia de la alianza entre Estados Unidos, Inglaterra y el sionismo.

Pero más allá de la censura, de las persecusiones y de las proscripciones que actualmente se intentan ejercer, está claro que cada vez más hombres y mujeres en todo el mundo deciden alzar sus voces contra esta tiranía del pensamiento único. Ellos son los primeros rayos de luz que anuncian el fin de esta noche y el comienzo de otro amanecer.

- - -Informe especial de la RED KALKIredkalki@libreopinion.com* Se autoriza la reproducción total o parcial de esta nota siempre que se cite la fuente

2 comentarios:

dennis_weaver dijo...

Pues mira, no conocía yo esa faceta de Gandhi, y aunque no me parece bueno que alguien apoye a líderes fascistas, razones para ello no le faltan.

Este estado sionista, fundado bajo el terror (no solo contra palestinos, los judíos, a los que solo le importa la sangre judía, mataron a decenas de civiles ingleses inocentes antes de fundar su puto Estado....y perdón por la palabrota)es un Estado asesino que tardó sólo 2 días, y digo 2 días, en invadir territorios palestinos...porque según ellos...."es su tierra prometida" ¿Prometida por quíén? ¿Por Abraham, Moisés, David...? Patético, realmente patético. Y son los sionistas, los que se apoyan en su "Moisés" los que critican que determinada parte del mundo islámico reclame territorios en nombre de Mahoma, entre ellos Alándalus. A mí me parece casi lo mismo, digo casi lo mismo, porque el fundamentalismo islámico no ha nacido del Corán, sino que ha sido provocado por el Talmud o como se escriba, mientras que la violencia sionista nació de ahi, del sionismo...

Y como he leído arriba antes, es patético que utilicen el holocausto nazi para no hacer sentir culpabilidad no solo a los alemanes, sino a todo el mundo. Todo el que no esté con Israel, es fascista.

Pues las cosas no funcionan así, el Estado de Israel es un Estado militar, neofascista, sin ningún tipo de respeto por la vida humana, un Estado, apoyado por el "lobby sionista norte americano", que tampoco siente ningún respeto por la vida humana,,,Iraq, Afganistán, Somalia, Corea, Vietnam, Hiroshima, Nagasaki...y no sólo eso,,,,sino su apoyo a dictaduras asesinas como Pinochet, Videla, Franco, incluso su apoyo a Sadam Hussein, al que proporcionó armas químicas que acabaron con la vida de miles de kurdos y de iraníes.

En fin, que sólo quería dejar constancia de mi apoyo al descendiente de Gandhi, y sobre todo, aunque lamentablemente no sea tan poético ni tan expresivo como él o ocmo ian, quería dejar mi opinión sobre el lamentable comportamiento del Estado de Israel, apoyado por EEUU, que están convirtiendo a Palestina en el nuevo ghetto de Varsovia.

Los judíos olvidan pronto.

Ian Grecco dijo...

Muy acertadas sus aportaciones. Lo que está claro es que los extremismos, vengan de donde vengan, sólo acaban causando dolor y destrucción. Sin embargo, soy un ingenuo, y sigo pensando que en cualquier lugar del mundo,sea donde sea, siempre hay gente buena que se da cuenta de que las cosas que suceden a su alrededor no son justas. Pero no basta con sentir: hay que protestar, moverse. De lo contrario, sólo seremos una panda de amebas a la deriva...